Hoy les traigo las imágenes que cuentan la historia de amor de Rocío y Alejandro.
Tuve la oportunidad de estar presente en la previa, el maquillaje y detalles finales de la novia, realizado por las genias de Génesis Studio. Ese momento que tiene una importancia sumamente relevante en la boda, donde convergen las emociones más intensas y diversas, donde las risas se fusionan con los nervios y alguna lagrimita.
En segunda instancia, la Iglesia, el momento del Sí, donde la gran emoción e ilusiones de los novios afloraron y se concluyeron con uno de esos besos que me encanta retratar, muy sentido y ansiado por todos los presentes.
La fiesta de Ro y Ale comenzó con una recepción al aire libre en un lugar soñado, y fue una increíble celebración, donde la felicidad, el baile, la diversión a pleno y el cotillón carioca se hicieron notar en cada momento, para sellar una noche que quedará guardada en sus corazones.
El detalle: los souvenirs, con una frase muy cierta y sabia «La resaca dura 1 día, los recuerdos son para siempre», dieron que hablar y generaron tanta complicidad con los invitados, que todos quisieron llevarse el suyo.
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